Ahora gano yo (Adesso vinco io)

Elegante, creativo y decidido para algunos; terco y desagradable para otros. Pero sin duda un ganador. Marcello Lippi ha sido uno de los mejores entrenadores de fútbol de la historia. A lo largo de su dilatada carrera, lo ha ganado todo: títulos y copas nacionales, las más altas competiciones europeas e intercontinentales de clubes, y, como seleccionador, logró el triunfo definitivo: conducir a Italia a su «cuarta estrella», el título de la Copa Mundial de 2006. Pero detrás del entrenador está la historia de un hombre de origen humilde. La historia paradigmática del hijo de un viejo socialista que se convirtió en el símbolo y capitán de un equipo de categoría inferior, sin ganar nunca un título. En su segunda vida, como entrenador, las cosas serían diferentes. Esta vez, sería él quien ganaría. En todas partes, en cualquier lugar y a cualquier precio.