432 (Dir. Amelia Ibáñez y Marcos Sánchez, 2019, Chile. 10 min.): 432 es paisaje, cuerpo y movimiento. Un ensayo audiovisual en el que el universo sonoro, la danza y el lenguaje cinematográfico convergen para interrogar las relaciones y nexos que vinculan al ser humano y el espacio físico natural. La matriz geográfica y los particulares elementos del paisaje de las Dunas de Longotoma (Chile), son los puntos de partida que repercuten, incitan y movilizan los cuerpos. Viento, arena, temperatura y sol se constituyen en disparadores que, lejos de restringir o limitar la libertad de expresión corporal, amplían las posibilidades de exploración y experimentación abriendo un espacio ilimitado para el ejercicio de una experiencia sensorial plena. En esa forma de entregarse sin condiciones al paisaje, la estructura de 432 se articula en una serie de piezas abiertas que el espectador puede completar, cerrar o continuar según su propia experiencia. El sonido, como elemento onmipresente y transversal del paisaje mutante de las dunas, se constituye en el espíritu que anima la voluntad de movimiento. Así, en la obra, su ritmo atiende a los patrones de la frecuencia 432 hertzios que según algunas teorías alternativas y también en opinión de varios músicos expertos en afinación, corresponde al espectro de vibración ideal que sostienen los sonidos del universo y la naturaleza.
Blasfemia (Dir. Pepo Silva y Betania González, 2019, Chile. 11 min.): Blasfemia es una serie de video-performance que trafica covers visuales, manipulados, ripeados, remezclados, copiados y pegados en otros canales de distribución (Steyerl 2014), degradando las fantasías del mainstream y la sacralidad de la alegría. Generamos prácticas anómalas, nos reapropiamos de lo sagrado y lo transformamos en desecho, ser desecho y quitarle el peso a la vida. Blasfemamos para acabar con la idea de crear y creer en el sentido de las cosas. Somos fuerza material que degenera tendencias para volverlas desobediencia, des-organizar los sentidos y la capacidad de almacenamiento, volvernos un bit, un spam, un algoritmo inadecuado. Blasfememos hermanxs, que todos nuestros altares se nos devuelvan como proyectiles que nos perforen, crucen e invadan en divinidad y gloria. Esta pieza emerge del ciclo Duplas de NAVE TV, curado y coproducido por NAVE.
Cartas del Futuro (Dir. Paulo Fernández, 2021, Chile. 24 min.): Ensayo audiovisual que surge como parte del proceso de la obra escénica Cartas de Navegación. Una segunda lectura que nos sumerge en un espacio-tiempo ecléctico de naufragio y deriva. En un despliegue polifónico emergen imágenes nebulosas, rituales conectados con el cuerpo colectivo que dan paso a ciertas revelaciones íntimas sobre ser, estar y cohabitar el presente. Cartas de Navegación es un laboratorio escénico llevado a cabo por un equipo creativo que se dispone desde sus fascinaciones individuales para negociar maneras de estar juntes. Su punto de partida son las cartas recibidas y recolectadas gracias a talleres realizados durante los confinamientos; cartas que son respondidas a través de este ensayo audiovisual.
Believe II / Proyecto Marcial (Dir. Matilde Amigo, 2019-2022, Chile. 9 min.): El proyecto Marcial sostiene un espacio para movilizar cuestiones planetarias tomando a Marte como posibilidad. Marte como potencia para cambiar el presente imaginando otros futuros, funciona como aquel lugar al que podríamos irnos, y que aunque nunca nos vayamos, nos empuja a preparar otros modos de habitar. El proyecto Marcial cree en la ciencia ficción feminista y latinoamericana como potencia para dar cabida a otros mundos fuera del paradigma establecido desde el patriarcado colonial. La serie de cápsulas audiovisuales BELIEVE entrenan desde el video la posibilidad de viajar al planeta Marte.
SEDA (Dir. Carla Bolgeri & Javiera Peón-Veiga, 2022, Chile. 10 min.): SEDA consiste en una red vibracional que es afectada mediante el contacto táctil entre cuerpos, sonoridades, secreciones y tensiones plásticas, en una escucha circular que va conectando hebras visibles e invisibles. Esta dupla indaga en la saliva y otras viscosidades como materialidades para preguntarse sobre el adentro y el afuera, sobre la tensión y la dilatación de los fluidos internos y su tránsito hacia una exterioridad donde explota y se transforma en otra cosa. En el estudio de esta materialidad observaron los insectos que construyen con sus babas una arquitectura sensible y vibracional. Y así llegamos al plástico, un “mineral” antropogénico, un residuo en el paisaje que da cuenta de nuestra presencia en la Tierra, un material sin límites con el que convivimos incluso hasta dentro de nuestros mismos cuerpos, y que nos permite tensar preguntas acerca del continuo naturaleza-cultura, orgánico-inorgánico. Esta pieza emerge del ciclo Duplas de NAVE TV, curado y coproducido por NAVE.
Conspirando un Yo (Dir. Pita Torres, 2020, Chile. 8 min.): “Conspirando un Yo” presenta un video para realidad virtual, en la complicidad errante de un camino que se apropia del fracaso y la afectividad para posicionar políticamente al cuerpo en la sensibilidad disidente. Saber escuchar, poder mirar, dejar sentir, querer contagiarse, dejar de tolerar y despertar, permitirme afirmar este cuerpx sin recurrir a prótesis estabilizadoras, buscando las libertades que más me gustaban, que más me potenciaban, me hicieran más libres, expandiéndome y multiplicándome. Voy a intentar vivir sin expectativas, con el ruido de las olas del mar, viajando para calmar los nervios, conspirando con otra, otra, otra… con fuerzas naturales que te dan vida, en un desierto largo y profundo, será entonces que podremos ser fuertes, ¿será que la alegría y su risa se puedan obtener en este infierno? Hay un yo singular cargado de muchas tribus, no podría definirme, soy una especie indefinida o quiero llegar hacerlo, había olvidado el placer que produce lo natural.
Oro Negro (Dir. Carlos Cortés Gallardo, Prod. Las Tías Cochinas + Terrorismo Audiovisual, 2021, Chile. 5 min.): Oro Negro es una propuesta escénica que aborda la temática del homoerotismo y la búsqueda del placer reprimido, proponiendo con ello una revisión de las conductas y estados eróticos que se vinculan al poder y el patriarcado. Instalando esta discusión bajo un contexto marginal, oculto y culposo, nos adentramos en el imaginario del mundo del cruising, para develar en esta sub - cultura algunos pasajes de rabia, tensiones, placeres y amor, que se viven en algunos de los lugares más inhóspitos de la ciudad. Aquí decanta lo pornográfico, el exhibicionismo, la inmundicia, la soledad, los miedos, y la culpa llevando al cuerpo a la desinhibición y el bestialismo lejos de los prejuicios morales que intentan corromperla.
Guerrilla Marika (Dir. César Cisternas & Wincy Oyarce, Prod. Guerrilla Marika, 2021, Chile. 5 min.): Nuestra estrategia de combate son nuestras cuerpas marikas, nuestros hocicos pintados, nuestros ojos llenos de fuego y sensualidad prohibida. Porque no somos colas de revista, somos ese gen mal mirado. Nuestra carne kiltra, morena, sudaca, andina, chola, indígena marcha alzando y quemando banderas. Porque nuestro tesoro colipato, travesti y marginal es un estado puro , silenciado. Somos un virus, una pandemia rosa que se expande y nuestro ataque será un Carnaval Liberado
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Texto curatorial por Kevin Magne Tapia (Chile):
La desfiguración de la imágenes, sin duda, un campo ampliamente desarrollado por la danza. El movimiento ha (re)conocido que aquella frontera iconográfica es una delimitación del cual unx se puede fugar. Así, el movimiento es pliegue y despliegue, una deformación constante del signo y símbolo, una transformación del cuerpo que se expresa en tanto territorio, afecto, paisaje, sentimiento, fuerza, animal, ficción, etcétera. Las fronteras han sido una construcción moderna y colonial para generar maneras específicas de comprender, ¿de qué manera ejercitar un desborde de la comprensión? “A través de la danza, sabemos que la materia no es imbécil”, expresaría Silvia Federici (2017), a través de la danza sabemos que somos materia en constante resignificación, siempre en atención al vínculo con el entorno y su reciproco aprendizaje.
Fronteras de la Imagen es una programación curatorial en retrospectiva de video danza geolocalizado en el territorio sudamericano, específicamente en Chile, comprendiendo en ella una multiplicidad de prácticas, identidades y movimientos corporales que van más allá del nacionalismo propio de las fronteras políticas. Los 15 cortometrajes expresan cuerpos que crean territorios y que lo encarnan en danzas furiosas. Cuerpos con historias, violencias y escrituras del tiempo. Cuerpos que se reconstruyen en una futuridad, en un movimiento ondulante, en la potencia de la imaginación, en el audaz baile sobre la frontera. En específico se han creado dos programas: (1) Sentir y crear con el territorio encarnado; (2) La potencia del desborde, en donde se piense, seduzca y desdibujen las fronteras; modificándolas, erosionándolas y propiciando apariciones de la corporalidad que danza dentro de una imagen que está destruyendo lo estático para posibilitar un mundo entre múltiples relacionamientos.
Lxs artistas que en este programa curatorial se presentan instan a preguntarnos, de manera corporal y sensible, las problemáticas políticas de las fronteras, propiciando un desplazamiento palpitante de las herencias coloniales, extractivistas y heterosexuales que hacen de la imagen en movimiento una relación crítica con la mirada, tal como argumentaría Didi-Huberman “Ciertamente, no existe una sola imagen que no implique, simultáneamente, miradas, gestos y pensamientos. Dependiendo de la situación, las miradas pueden ser ciegas o penetrantes; los gestos brutales o delicados; los pensamientos, inadecuados o sublimes” (p.13). Así, Fronteras de la Imagen expone apariciones para ser observadas y sentidas, danzadas y gozadas, erosionadas y fracturadas por la potencia de lo vinculante.