Pensar y dejar salir. La extensión del pensamiento es tan compleja que podría manifestarse en formas que constantemente matarían en el tiempo hasta que se pierda la cuenta. La manera en que entendemos todas las figuras de la imagen y sus consecuencias juega por siempre con la posibilidad de transmitir la ferocidad de nuestro juicio, o sus miles de facetas y expresiones. El Laboratorio de Crítica Experimental funciona cómo eso. Un espacio de juego corporal sin pretensiones entre lo interno y lo externo, lo abstracto y lo material, la interpretación y la exteriorización, dejando la palabra en otras ocasiones.
Tallerista: Manuela Bonilla
Actriz, dibujadora y socióloga en destrucción. Ha dirigido y acompañado diferentes procesos pedagógicos a través de la exploración teatral y plástica, abordando temas como el género, la violencia y el cuidado colectivo. Sus esfuerzos investigativos están encaminados a propiciar espacios que nos permitan reflexionar desde el cuerpo, el juego y el movimiento.
Recomendación: Asistir al taller con ropa cómoda, disposición para el movimiento y rock.