A taste of a whale

Los balleneros feroeses han cazado ballenas piloto durante siglos, pero hoy los activistas internacionales condenan las viejas tradiciones. Una mirada sobria a los dilemas de un conflicto, que puede ser más complejo de lo que parece a primera vista. La caza de ballenas solía ser una necesidad, pero hoy el mundo está globalizado y puedes conseguir todo lo que tu corazón desea en el supermercado. Sin embargo, cada año se cazan ballenas en los fiordos de las Islas Feroe y se reparten kilos de carne entre los isleños. Las sangrientas escenas han causado indignación en los medios internacionales. Con cuchillo en mano, los feroeses señalan la hipocresía de quienes condenan la caza de ballenas pero hacen la vista gorda ante los métodos de la industria cárnica. ¿Es mejor comer carne molida importada que carne de ballena capturada en la naturaleza? Cuando los activistas de Sea Shepherd viajan a las Islas Feroe para manifestarse, el conflicto estalla. Con un ojo sobrio y perceptivo para las complejas fracturas entre opuestos, el director Vincent Kelner aborda el conflicto sin elegir bando. Porque tal vez haya más de dos lados en lo que parece ser un asunto claramente trazado. Tradición, cultura, historia, identidad, sostenibilidad y biodiversidad son solo algunos de los dilemas a los que se enfrentan los isleños en la actualidad.